sábado, julio 03, 2010

HABLANDO CON DIOS (última parte)

Yo: Y bien, Dios hemos pasado mucho tiempo juntos.
Dios: Hemos pasado solamente, el tiempo no tiene relevancia alguna.
Yo: Dime una cosa.
Dios: Tú dirás.
Yo: ¿Qué ocurriría si me quisiese ir?
Dios: Pues, te irías.
Yo: ¿...A donde podría ir?
Dios: Eso lo debes decidir tú.
Yo: ¿Acaso no debo hacer lo que fuera tu voluntad?.
Dios: Eres la única criatura que siendo libre se busca amos a quien tener que obedecer.
Yo: ¿Qué quieres decir?
Dios: Las cosas fueron resueltas desde el comienzo, nada nuevo puede alterarse ya. Si se cambiara un ápice el orden natural todo sería un caos.
Yo: ¿Pero debe hacerse tu voluntad, no es así?
Dios: Y mi voluntad es.
Yo: Si vas a comenzar con tus trabalenguas...
Dios: ¿Podrías decirme cuánto tiempo llevamos conversando?
Yo: Hmmm, no ciertamente. Tanto me parece que hemos estado conversando sólo unos minutos como también unos mil años.
Dios: Un hombre puede recapitular su vida en torno a lo vivido, pero ¿cómo Podría hacerlo uno que no ha vivido sino que eternamente vive?
Yo: En español , please.
Dios: Mi voluntad es. No ha sido, ni es ahora, ni será, sólo es. Sin tiempo todo “es” ,ni siquiera significa presente solamente “es”. Sin pasado, ni presente, ni futuro. En ese sentido la medición de las cosas a base de la revisión del pasado no cabe, como tampoco cabe la predicción del futuro, ni el análisis del acontecer de las cosas.
Yo: ¿y que cabe?
Dios: No es fácil prescindir del tiempo, la existencia está regida por el, pero acá ni siquiera la existencia nos da sustento. Pues “somos”, sin principio ni final.
Yo: No te debes esforzar mucho para que no te entienda ni mierda ,¿he?. Ni siquiera te hago transpirar. Sin embargo de nada me está sirviendo lo que me dices, pues tremenda “gracia” es que te entiendas tú mismo.
Dios: ¿Cómo podrías definir tu estancia en este lugar?
Yo: vamos a ver...un tanto extraña, muy extraña, no se siente la sensación de que el tiempo avance, pero tampoco que se haya detenido. No podría decir desde cuando estoy acá, ni siquiera desde cuando comencé a responder esta pregunta...
Dios: El tiempo no existe en este lugar. Así tu presencia en esté lugar sólo “es”.
Yo: ¡Ja!. Entonces no podría decirte : “Ya te respondí” . o “Te responderé” o “Te estoy Respondiendo” sólo te diré : -Mi respuesta “es”-. Ya, estoy listo, haber, que más quieres saber chicuelo...
Dios: ¿A donde te quiere ir?
Yo: Pues, no sé, a ir a esconderle las llaves a san Pedro o a aprender a tocar arpa, no sé.
Dios: ¿Te sientes aburrido?
Yo: Nunca dije que me iría por estar aburrido. Podría irme sólo por irme.
Dios: Así es.
Yo: ¿Y si me voy puedo volver?
Dios: Y por qué te preocupa el volver , si aún no te has ido?
Yo: Puede no gustarme el lugar a donde vaya.
Dios: ¿Y aún así te irías?
Yo: Quizá.
Dios: Pues cuando quieras irte puedes irte.
Yo: Y puedo volver...
Dios: Puedes volver.
Yo: Y si me pierdo tratando de volver.
Dios: Pues te pierdes.
Yo: Ha claro, ahí estaba el asunto ¿no?. Empezamos de nuevo con la cosa. Entonces otra con la vida en la tierra, el pecado, la salvación, el juicio, el infierno y todo lo demás. Si no te estaré conociendo yo...
Dios: El que tú quieras irte eso te incumbe a ti, el que tú no sepas como volver me ha de incumbir a mi también?
Yo: Eso es trampa...
Dios: Cuando las cosas van bien es por tus meritos cuando van mal es por mi voluntad...
Yo: Bien, yo no he dicho que todo sea tu culpa, pero algo habrás tenido que ver.
Dios: Di inicio a las cosas, como te di inicio a ti (si así quieres llamarlo), más todo ha de tener una forma de ser en la existencia, Tú la tienes
Yo: Pero es una forma imperfecta, podrías haber sido más sabio oye Dios.
Dios: Si a cambio de ser perfecto yo tuviera que dirigir tus acciones perderías la capacidad de elegir y eso nunca lo aceptarías. Por otro lado la perfección es una sola y si todos fueran perfectos serían todos iguales, ya te lo he dicho, y tú no querrías siquiera que te compararán con otro de tus pares.
Yo: Pero no hablo de perfección pues Dios.
Dios: No existe la media perfección, ni un poco menos perfecto. Al elegir se deben tener alternativas, no hay elección sin opuestos.
Yo: ¿Por qué debemos elegir y si yo no quisiese elegir?
Dios: Pues puedes seguir a cualquiera de las religiones del mundo, ellas elegirán por ti.
Yo: ¿Y será el camino correcto?.
Dios: Y eso que te preocupa, ya no es tu elección. Ya no estarás yendo a donde quieres ir sino a donde se va.
Yo: Pero la elección no hace más que complicar las cosas. Gracias por el favor...
Dios: La capacidad de elegir, es la sustancia que mantiene al soy.
Yo: Sabes Dios, contigo cada vez sé menos que soy...

FIN.

10 comentarios:

Thiago dijo...

jaj este dios es un demagogo de la ostia, jaaj Yo si fuera tú ya me había suicidado, mas que nada por ponerle todo el cielo perdido, jaajaj

Bezos, cari

Trovator dijo...

Interesante la manera filosófica de conversar con dios... siempre queriendo hacerlo pisar el palito.... me parece que a ratos hasta ese señor se me torna algo molesto...

Un abrazo camarada!

marichuy dijo...

Luis

Y entonces ¿elegimos, pero ya no es nuestra responsabilidad el que el camino electo sea o no el adecuado? Pucha, si Dios no tiene todas las respuestas, me han timado desde la infancia.

Saludos

Lolle dijo...

Wow, bueno final, y es q en vdd creemos saber quienes somos y al final no es asi, nadie nos conoce ni nosotros mismos

Ademas, x lo q se lee, ni Dios sabe... q mal...

saludos!

MauVenom dijo...

Te dejo un saludo y me hago de lado hasta que termine tu conversación con Dios

no quisiera interrumpir

y además no nos hablamos muy bien (él y yo, claro).

Saludo

Alma Mateos Taborda dijo...

Un diálogo impagable, inteligente y maravilloso. Aplaudo tu talento. ¡Brillante!Me has mantenido expectante hasta el final. ¡Bravísimo!!Un abrazo y ¡Felicitaciones!

LUIS TORRES dijo...

Alma: Gracias por tus palabras Alma, no creo merecerlo la verdad, mas bien leyendo Blog como el tuyo aprendo.

la MaLquEridA dijo...

No sé si dios existe, aún me lo estoy preguntando.

Hoy escribí un post y no es triste, prometí avisarte, ahora claro si quieres esperar cuando haya uno alegre te aviso.

,)

Pinche Vieja dijo...

Te hubieras llevado a fray jodas y así me constaría que, después de él, ya no hay un dios...

Ya ves como es él de agresivo...

Pluma Roja dijo...

Un diálogo, muy bien pensado, con un desarrollo interesante. Lo sigues sin aburrirte. Me encanta esta tendencia tuya a filosofar. Aunque tendría algo que decir sobre la elección, creo que la elección no es acerca de una religión es acerca de acciones personales. Muy interesante sí. Gracias por haber dado con mi blog, así pude dar con tu maravilloso blog.

Saludos cordiales. Te seguiré ya.